jueves, 3 de marzo de 2011

Periodismo y política

En el presente ensayo hablare sobre las relaciones, diferencias y posibles aproximaciones existentes entre el periodismo y la política, basándome en el libro: La fuga del mundo de Germán Rey, en donde expone temas muy importantes para el campo del periodismo y la comunicación, reflexionando a su vez sobre la independencia fuertemente controvertida del periodismo y el debate sobre el sometimiento del mismo hacia el poder.


El periodismo de América latina ha estado marcado por el poder no solo de un conglomerado de gente adinerada, sino que más que todo se ha visto envuelta en la manipulación del poder político. Esta manipulación se evidencia en la mayoría de medios de comunicación en donde la información que se le otorga a la ciudadanía es presentada ya sea para defender o para combatir las fuerzas políticas; y se benefician del hecho de que la radio y la televisión son los medios más utilizados en América latina en donde se cree que son el refugio de los pobres.


Los cambios sociales también son un fuerte influenciador en la difusión de la información, ya que el periodismo busca comprender como evoluciona la sociedad y trata de adaptarse a lo que esta demanda, teniendo que adoptar la inmediatez, la combinación entre información y entretenimiento y dar a conocer la información de una manera más directa. Por lo que es evidente que el periodismo sufre la renovación constante de su propio oficio, haciendo así que la experiencia en esta profesión no sea acumulable.


Por otra parte, para dar una de las diferencias mas evidentes en los últimos tiempos acerca del periodismo y la política, es que este ultimo ah perdido la aceptación que tenia vigente, perdiendo su capacidad de convocar y atraer a la población; mientras la política tiene un gran problema por obtener convicción y credibilidad el periodismo se hace más confiable y adquiere la cualidad de unir e identificar, pues la mayoría de personas le damos más importancia al entretenimiento, desconectándonos de las decisiones públicas y dependiendo más de lo que los medios audiovisuales nos quieran o no ofrecer, haciendo más importante la farándula y el amarillismo acerca de la vida privada de los políticos que la difusión de sus propuestas o ideas. En este punto la responsabilidad de cual realidad va ser contada recae en los medios de comunicación.



El reconocimiento del poder de los medios y la relación entre la información y la construcción de la ciudadanía, resultan ser unos agentes vinculadores entre el periodismo y la sociedad; para controlar su buen desempeño es necesario la ayuda de unos observatorios quienes ayudan a vincular a la democratización con las comunicaciones y la participación de sectores sociales en la tarea de control político de los medios y en general de la producción y circulación de la información. El observatorio político aproxima las prácticas concretas que se originan en el campo popular y aportan en la construcción de una propuesta política, social y económica, resaltando como mencione anteriormente la importancia de la comunicación para la democracia.


Uno de los observatorios más reconocidos es ANDI, La Asociación Nacional de Empresarios de Colombia, es una agremiación sin ánimo de lucro, que tiene como objetivo difundir y propiciar los principios políticos, económicos y sociales de un sano sistema de libre empresa. Está integrado por un porcentaje significativo de empresas pertenecientes a sectores como el industrial, financiero, agroindustrial, de alimentos, comercial y de servicios, entre otros. La actualización, oportunidad y confiabilidad, son las características fundamentales de la información que la ANDI pone en manos de sus afiliados para que logren sus objetivos.



Una relación que se puede presentar entre política y comunicación es la que se refiere al control político por medio del cual los ciudadanos tienen la capacidad de vigilar los acatos de los gobernantes, la orientación social de sus propuestas y el rumbo de su gestión pública. A este tema se vincula la construcción de la agenda pública que es sin duda un encuentro entre la democracia y la comunicación.


Por último tenemos claro que el factor diferenciador entre periodismo y política no es el manejo de la palabra puesto que al lector al igual que al votante hay que decirle lo que quiere escuchar. Teniendo claro que el periodismo no es propaganda, por el contrario es una opinión que se documenta, estudia y emite juicios rigurosos. Por lo que ahora se estima que un buen periodista esta lejos de acobardarse frente al poder, tiene es que enfrentarlo y dar a conocer su punto de vista.

No hay comentarios:

Publicar un comentario